En Arequipa, así como en otras regiones del Perú, la historia de la contabilidad podría remontarse al Imperio Inca, donde el control de los recursos, para su correcta administración, se realizaba con los khipus, las soguillas de colores de las que habló Viviana Ruth Moscovich en su libro El khipu y la yupana (2016).
En adelante, podríamos mencionar algunos hitos importantes durante la época de la colonia, como la aplicación de impuestos como el diezmo y la alcabala. Sin embargo, la región comienza a escribir su propio capítulo en la historia de la contabilidad desde inicios del siglo XIX, en el Colegio Nacional de la Independencia Americana.
Fundada en 1827, esta institución fue una de las primeras que se especializó en la enseñanza de la Contabilidad, bajo la responsabilidad del doctor Juan M. Polar Vargas, de acuerdo con el documento Origen y trayectoria, del Colegio de Contadores Públicos de Arequipa.
Luego, en 1930, comienza a funcionar el Colegio Mercantil de Arequipa, dedicado a brindar conocimientos de caligrafía comercial, documentación mercantil, práctica de oficina, manejo de las calculadoras mecánicas y, por supuesto, contabilidad. En esta última materia, uno de sus docentes más destacados fue el contador Jesús Salcedo Aguirre.
En 1932, por iniciativa de los hermanos Mario y Manuel Aedo Guzmán, se fundó la Asociación de Contadores de Arequipa, que originalmente funcionó en el local de la Federación de Empleados de Industria y Comercio (FECIA).f